
POSDATA Digital Press| Argentina
Por Mirtha Gladiz Alvarez| Escritora |Poeta | Embajadora Argentina de las 100 voces del Legado de los Sentires.
Me encuentro caminando por el centro de una calle...
¡Comenzaron a unirse personas con la misma intención!
Cuanto más caminaba más gente acompañaba, no sabíamos hacia donde íbamos, solo caminábamos.
De repente empecé a sentir un latido en mi corazón que se replicaba por cientos de ellos, era como sentir el corazón de todos.
Seguíamos caminando en la búsqueda del ¿no sé por qué ? ¡¿o quién?!
Pero todos pedimos por lo mismo y eso se persibía en el aire.
Mirando siempre hacia delante.
Sentía latir los corazones de cada uno en mi cuerpo, con el mismo sentimiento, con la misma búsqueda, con la misma desesperación, con la misma ansiedad de encontrar ese no sé qué ...
Pero era la única esperanza.
¡Seguí caminando con todo ese latido en Mi ser!
Miro hacia un costado y una voz ruda ,me dice:
—¡¡¡NO ME MIRES QUE YO NO SOY!!!
Ni siquiera alcanzaba a ver sus rostros, agachados y cubiertos...
¡Instantáneamente sin titubear ni temer! Seguí mi camino en medio de la multitud...
Después de un largo trecho, vuelvo a mirar hacia mi costado por segunda vez.
Nuevamente
—¡NO ME MIRES QUE YO NO SOY!
¡Cierro los ojos y con fortaleza miro hacia delante!
¡Cómo que se unían las mentes! caminábamos en un solo pedido, un solo sentir hacia un solo sentido.
De repente miro hacia arriba ,una cúspide. Del ápice, baja con fuerza un resplandor abriendo entre la multitud un enorme circulo...
Y frente nuestro, un hombre ...
Común y corriente...
Por un momento lo miré con intensidad, lo miré largamente y me pareció percibir en su semblante una sonrisa secreta ...
Me acerqué y era a quien buscamos, aunque en apariencia nos confundía, percibíamos la paz...
Veo en su rostro una Lágrima caer, retrocedo un paso hacia atrás... pero vuelvo... me acerco y tomo sus lágrimas suavemente, como quien recoge algo puro.
Él, me da un mensaje ...
Me alejo despacio llevando en el cuenco mi mano un capullo resplandeciente, lo acerco hacia mi pecho resguardándolo.
Despacio, fresca y aliviada fui alejándome lentamente...
—"Voy a venir ...voy a venir a ayudarlos" — (me dijo )
Ese es el mensaje.

Un episodio conmovedor que revela la magia de lo extraordinario en lo cotidiano.

Un retrato introspectivo sobre la relación del protagonista con su psicólogo.

"Un viaje rutinario transformado en un escenario surrealista, lleno de simbolismo e ironía, reflejando la fragilidad y el drama de lo habitual."

