Algunos concejales citados por el diario Le Parisien han afirmado que temen que el cristal convierta la torre en una "fortaleza". El perímetro de seguridad podría disuadir a los turistas que simplemente quieran sacar una fotografía bajo el monumento y que no tengan intención de visitarlo. Martins ha replicado que los visitantes seguirán teniendo acceso a pie a la torre, después de haber superado controles de seguridad.
El vicealcalde ha dicho que el hecho de eliminar las barreras antiestéticas que ahora mismo rodean la Torre Eiffel permitirá tanto a los visitantes como a los parisinos tener "una mejor vista del monumento". Según ha asegurado, un equipo de arquitectos ayudará a diseñar el muro, de tal forma que no interfiera con el Sena, que bordea la torre al norte, ni con el Campo de Marte, que lo hace al sur.
La seguridad se ha visto reforzasa en los puntos turisticos de Francia, los sistemas de transporte y los lugares de culto después de una serie de ataques yihadistas que costaron la vida a alrededor 239 personas en Francia entre julio de 2015 y julio de 2016.
Vía:El País