POSDATA Digital Press| Argentina
Por María Cecilia Marsili
Que, aunque yo soy un cualquiera,
hoy vine para dejarle
en esta preciosa fiesta
la humilde flor del suburbio
que nació en una maceta,
pero que tiene un perfume
que de lejos te recuerda
el cariño de la javie
y el amor de una pendeja.
A la señora academia .
– César Bruto
No todos ante la sequía de ideas, tiene la gran idea de crear un personaje.
Al escritor Carlos Warner (1905-1984) le habían encargado un editorial, no se le ocurría nada y entonces presentó un texto plagado de errores ortográficos y gramaticales CESAR BRUTO.
Rico Tipo, Versos y Notisias, «Mente sana in córpore roto», y más tarde: «Los grande inbento de este mundo» son algunas de sus grandes obras.
Warnes y Conti también escribieron los guiones y realizaron la escenografía de la telecomedia Juicio oral al paso.
Colabora en muchas otras publicaciones: Vea y lea y Tía Vicenta, el diario Clarín y Radiolandia 2000.​
Escribe ―a partir de 1960 y durante diez años― los guiones del programa televisivo de Tato Bores
En radio, trabajó junto a la periodista Betty Elizalde (n. 1940) en el recordado ciclo Y a mí... ¿por qué me escucha?
El escritor Julio Cortázar abre su famosa novela Rayuela (1963) con el capítulo «Perro de San Bernaldo» del libro “Lo que me hubiera gustado ser a mí si no fuera lo que soy de César Bruto”.​También dedica un elogio a la escritura de César Bruto en el libro La vuelta al día en ochenta mundos, donde la ubica en un pie de igualdad con la de Macedonio Fernández y Bioy Casares.
Aquí va nuestro homenaje:
Te cuido, cuidame
Anduve toda la noche sonambuleando por los corredores, estaba acostumbrada a caminar dormida hasta cuando las monjitas nos rescataron sabimos lo que era dormir tumbados.
La superiora nos había insistido para estudiar y aceté; desde el principio anduvimos a la escuela con los otros gurices, y a mi descues de lo segundo también me obligó a prender para cuidar viejos; que dureza todo eso de estudiar; yo le pedia a la madrecita que no me martire mas con las oraciones y los resos. Ella insistió, siempre quise ser algo en la vida pero puta q’e difícil pa’el que amance en una sanja.
Yo tenia la procupacion de si los viejos me iban a querer o no, puta que son guenos, si están solitos como una vio, hasta con las tramitaciones yo les ayudaba, lo que tuve que prender mire.
Que era el cebeu o una clave, Ahhh tambin me hicieron un de ene i para no ser mal documentada y poder trabajar. Tuve que buscar antecedentes y documentos y inventé una especie curricu pa’el vejestorio asi m’acetaban.
La monjita me emprestó el dinero para la imprimisión de los documentos.
El primer dia ay con ellos tuve medio miedo, si una mete la pata el aguelo, anque ya se que no es mi tata pero yo no conoci al mio, el aguelo tira la pata.
Me fui acostumbrando, hasta aprendi a hablar mejor ba un poco en tano, otro en mi idioma que que se yo cual es, lo lindo que nos entendiamos con los viejitos, con acaritas, música,
Hasta sentí que yo siempre habia sido asi viejita, tristona melacolina me llamaba una señora repituca. Ellos no eran mis aguelos y pero yo si era nieta de todos ellos.
Tambien aprendi que duro cuando uno enferma o no sabió quien era yo y despue no lo ves mas.
Pero siempre venia otro, yo tenia un aguelo nuevo y el una nieta que le leia, bueno mucho yo inventaba, ya me martiraba también la monjita con eso de las vocales y las que suenan.
Alli me quedé siendo una nieta casi eterna, con aguelos eternos que entraban por un ratito nomas o pa’siempre, a algún hijo, hijoe puta se le olvidaba el viejo, y gracias a la ayuda y coscorrones de la super trabajé mucho tiempo como gerente o algo asi con con ellos.
Lo mas lindo era la festejacion de algún abuelazgo nuevo o los cumpleaños.
Ahora yo, miro desde mi silla rodante, ya soy una abuela mas